Intrusion (2021) es un thriller, con elementos de terror, estrenado por Netflix. Se trata de un producto genérico destinado a completar el catálogo de novedades. Dirigida por Adam Salky, con Freida Pinto y Logan Marshall-Green. Un marido un tanto posesivo en cuestión.
Por Nicolás Bianchi
Dentro de las variantes habituales de los thrillers genéricos que las compañías cinematográficas, o ahora las cadenas de streaming, manufacturan como en una línea de montaje, Intrusion se ubica en la sub categoría de invasiones hogareñas. Como la reciente y fallida Don´t Breathe 2 (2021), por ejemplo. Acorde a los tiempos que corren su narración se apoya en dirigir las sospechas no sobre uno de los intrusos sino hacia la figura de uno de los habitantes del hogar: el marido.
Meera (Freida Pinto) es psicóloga de niños y adolescentes y lo primero que se cuenta de ella es que fue paciente oncológica. En la ducha Meera tantea su pecho y encuentra un bulto. Luego de acudir al médico se confirma que es una falsa alarma, no era nada. Esto es así porque Intrusion no trata sobre el cáncer sino sobre una relación marital en la que el hombre busca tener una posición de control absoluto.
Cuando Henry (Logan Marshall-Green) encuentra los resultados del estudio en la cartera de Meera le reprocha no haberse enterado antes. ‘No somos el tipo de pareja con secretos’, le espeta el desarrollador inmobiliario que construyó la casa, moderna y amplísima, en la que viven. La pareja se mudó desde Boston al Oeste en busca de tranquilidad.
El plan de ambos se ve interrumpido cuando luego de una cena romántica regresan a su hogar y encuentran signos de que alguien ingresó, revolvió todo, pero solo se llevó dos teléfonos celulares y una computadora. Así queda planteado el relato de una película que luego va a proporcionar varios giros, la mayoría previsibles más allá de algunos detalles que pueden resultar sorprendentes.
El principal acierto del guión de la película, a cargo de Chris Sparling, es plantar algunos pequeños indicios sobre el carácter del personaje de Henry. Al reproche antes mencionado se suma una frase que el marido le dice a su mujer cuando vuelven de la cena. ‘La construí para ti’, comenta en alusión a la casa. Esas pequeñas referencias se suman al deseo explícito del protagonista de “cuidar” a su mujer, lo que se enmascara en el pasado de enfermedad de la mujer pero habla de un presente un tanto obsesivo.
No hay más elementos destacables en Intrusion. Es un thriller más, de calidad estándar. La imagen, la iluminación, la trama y hasta las actuaciones están extraídas como de una suerte de manual con el que se confeccionan películas de este género en la actualidad. El foco sobre el marido obsesivo y la mujer que busca, además de la verdad, algo más de libertad le dan el condimento actual. La película es así tan efectiva como olvidable.
Estreno de Netflix. Contacto: elgolocine@gmail.com.
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