En esta película de Stephanie Allynne y Tig Notaro estrenada por Max no pasa absolutamente nada relevante. Cuenta una historia de amistad con el formato de una comedia romántica.
Por Nicolás Bianchi
Dakota Johnson, que en este caso interpreta a la protagonista Lucy, no se caracteriza por su capacidad de proveer interpretaciones profundas. Es dueña de un rostro muy bonito e hija de Don Johnson y Melanie Griffith, por lo que su acceso al mundo de la actuación debe haber estado aceitado por los contactos de sus padres. Sus carencias dramáticas empeoran cuando un guión como el de Am I OK? no le entrega ningún tipo de resguardo o protección.
Es decir, en una película bien producida, filmada y escrita, los problemas de Dakota para actuar convincentemente pueden pasar desapercibidos. Pero nada de eso sucede en este caso. Ahora bien, no todo es culpa suya. La historia presenta a Lucy en un rol central y a su mejor amiga Jane (Sonoya Mizuno) como personaje secundario. A medida que avanzan las primeras escenas queda claro que el foco del film está puesto en esa relación de amistad.
Lucy y Jane son dispares. La primera es insegura y no está para nada “realizada” en su vida. Es una pintora que no pinta y trabaja en un spa como recepcionista. Por el contrario, Jane es profesional, trabaja en una empresa de publicidad, tiene novio y le va, supuestamente, muy bien. De hecho, su jefe le ofrece un traslado a Londres junto a un ascenso. Cuando Jane le comunica esto, Lucy queda devastada y se emborracha a más no poder.
Además, esta situación genera algunas rispideces entre ellas. En paralelo, se comienza a desarrollar una subtrama sobre la vida sexual de Lucy. A los 32 años, este personaje confiesa que nunca ha disfrutado mucho de los encuentros que ha tenido con hombres. Esto se debe a que se siente atraída por mujeres. Pero no se anima a dar el primer paso. Su compañera de spa, Brittany (Kiersey Clemons) aparece como un objeto de deseo cada vez más fuerte.
Todo esto configura una crisis para la protagonista y es además lo que se tiene que resolver en el film. Am I OK? está filmada sin ninguna gracia. Casi todo sucede en interiores y luce como un decorado barato de televisión. A la poca destreza actoral se suma un guión torpe. Cuando la película tiene que generar tensión provoca vergüenza ajena.
Por lo tanto, se trata de un producto totalmente menor que Max estrena, probablemente, por el simple hecho de ofrecer una novedad. Nadie que pase por alto esta película se va a perder algo importante.
Está en Max. Contacto: elgolocine@gmail.com
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